De
acuerdo a los científicos los gorilas
son los segundos parientes más cercanos de los seres humanos después
de los chimpancés. Los seres humanos y los gorilas comparte un ancestro
común y el 1,4% de los genes humanos se diferencias de
los gorilas, no podemos permitir que esta especie desaparezca, si lo
hacemos perderemos la comprensión de la evolución moderna de los seres
humanos
En
la actualidad los gorilas son una de las
especies más amenazadas de la naturaleza; padecen de la destrucción
de su habitad a través de la tala, la minería, la producción de carbón
de leña y la expansión de la agricultura, la caza
furtiva y el comercio de carne de animales silvestres, de los
efectos de los conflictos armados y enfermedades como el ebola. Tres de
las cuatro especies están listadas como “críticamente en
peligro de extinción” en la lista Roja de la UICN. No olvidemos que
la naturaleza es creada por Dios. Y no es el hombre la persona más
indicada para destruirla, por lo tanto debemos condenar la
muerte indiscriminada de Gorilas, al igual que los seres humanos
tienen derecho a vivir libremente en su habitad al igual que el resto de
los seres que habitamos en el planeta.
Es una especie de mamífero del orden de los carnívoros y aunque hay
una gran controversia al respecto, los últimos estudios de su ADN lo
engloban entre los miembros de la familia de los osos
(Ursidae), siendo el oso de anteojos su pariente más cercano, si
bien este pertenece a la subfamilia de los tremártenos. Por otro lado,
el panda rojo pertenece a una familia propia e
independiente; Ailuridae. Nativo de China central, el panda gigante
habita en regiones montañosas como Sichuan y el Tíbet, hasta una altura
de 3500 msnm.
Está en peligro de extinción; la especie está muy localizada. Con
1600 ejemplares viviendo en las selvas y 188 en cautiverio (estadísticas
2004 - 2005), informes demuestran que la cifra de pandas
viviendo en libertad va en aumento. El oso panda es el símbolo de
WWF (Fondo mundial para la protección de la naturaleza) desde 1961.
El nombre del panda en chino significa 'gran oso-gato Este nombre se
debe a que, a diferencia de las demás especies de oso, el panda posee
pupilas verticales, que recuerdan a la de los gatos.
Exteriormente, el panda se asemeja a un oso de coloración
contrastante. El panda de Sichuan presenta el reconocido pelaje negro y
blanco, mientras la subespecie de Qingling tiene un pelaje de dos
tonos contrastantes de marrón.
Las orejas, nariz, los pelos alrededor de los ojos, los hombros y
los miembros son oscuros. La cara, vientre y el lomo son blancos. Las
orejas son ovales y erectas. La pata del panda, con cinco
dedos, presenta un "sexto dedo" a manera de un pulgar. Se trata de
la modificación de un hueso sesamoide de la muñeca. Stephen Jay Gould,
escribió un ensayo sobre este caso, que publicó en la
recopilación The Panda's Thumb (1980).6 Sus patas delanteras son
fuertes y aptas para escalar y más largas y musculosas que las traseras.
Sus ojos son pequeños, y mientras las pupilas de los
demás osos son redondas, las del panda son como las de los gatos, lo
que les da el nombre en chino de oso-gato.
Las crías de panda al nacer pesan de 90 a 130 gramos, y es casi pelado, pero de adultos, pueden pesar entre 70 y 125 kg.
A pesar de pertenecer al orden de los carnívoros, el panda es un
animal mayormente herbívoro, alimentándose casi exclusivamente de cerca
de 30 especies de caña de bambú (el 99% de su dieta
consiste en bambú). Se sabe que el panda también utiliza insectos y
huevos como fuente de proteínas. Es posible que incluya, además roedores
y crías de ciervo musk.
La baja tasa de natalidad, la alta tasa de mortalidad infantil y la
destrucción de su ambiente natural lo colocan bajo la amenaza de la
extinción. La ley china es muy rígida en cuanto a su caza,
lo que ha disminuido esta problemática. Las principales causas de
peligro para el oso panda son la dificultad para reproducirse cuando
están en cautividad, en parte debido a su extrema timidez, y
la destrucción de su hábitat natural, al talar miles de hectáreas de
los bosques de bambú. Otra causa importante de su desaparición son los
cazadores furtivos, que existen a pesar de los castigos
impuestos por el gobierno chino en caso de cazar ilegalmente un oso
panda.
No dejemos que estas especies se conviertan en una historia más.
A pesar de que parecen verdaderos osos de peluche, este adorable animal
es un marsupial que nada tiene que ver con los osos. Las hembras llevan
a sus crías recién nacidas en la bolsa marsupial durante seis meses
aproximadamente. Cuando la cría sale de la bolsa se agarra a la espalda
de su madre o a su tripa, acompañándola a todas partes hasta que tiene
cerca de un año.
Los koalas viven en el este de Australia, donde hay más eucaliptos. A
los koalas les gustan tanto estos árboles que casi nunca los abandonan.
Además, gracias a sus extremidades y dedos oponibles se mantienen
cómodamente sobre ellos. Los koalas pueden dormir hasta 18 horas al día,
sujetos en las horquetas y rincones de los árboles.
Cuando no están durmiendo se alimentan de las hojas de eucalipto,
especialmente por la noche. No beben mucha agua, por lo que su
hidratación proviene de las mismas hojas. Cada koala come una gran
cantidad comparado con su tamaño: aproximadamente un kilogramo al día. A
veces las almacenan en una especie de bolsas que tienen en las
mejillas.
Poseen un sistema digestivo especial con un estómago muy largo que les
permite digerir las duras hojas de eucalipto y que evita que su veneno
les haga daño. Los koalas comen tal cantidad de estas hojas que tienen
un olor muy peculiar que recuerda a las pastillas para la garganta.
En la década de 1920 y 1930 la caza de estos mamíferos rechonchos y
peludos fue muy popular, por lo que su población disminuyó
considerablemente. Gracias a los programas de reintroducción han vuelto a
aparecer en su hábitat natural, pero siguen siendo pocos y están
dispersos. Los koalas necesitan mucho espacio, unos cien árboles por
koala, lo que supone un problema grave debido a la disminución de los
bosques australianos.